lunes, 30 de julio de 2018

Escribo por terapia 1

extraño tanto una casa que no conozco, que nunca habité, extraño el olor que profesan esas paredes, el calor del invierno cuando se está dentro de esa casa, escribir como terapia, y tener un perro blanco que nunca ha sido mío. Vivir así en otra parte, con otro clima, en familia, casi con amor, sin preocupaciones de rutina, sin vidas que llenar. extraño esa casa que no conozco, porque está lejos, porque tiene gente, y yo aquí tan extraña tan distinta soñando que no siento nada que al fin estoy sintiendo poco, envolviéndome lentamente en mis brazos, ocupando la tristeza como almohada, durmiendo muy profundamente.