quería gritártelo en la cara.

ahora cuando te miras ya no ves lo mismo, no ves lo que solías ser, pero aún así, cuando te dabas cuenta que eras tú la que cometía errores & nadie más que tú, seguiste cometiendo delitos, mezclando palabras con caras bonitas haciendo creer a todos lo que no eres, mezclando tus ganas de ser escuchada y amada, mezclando esas ganas de sobresalir con una expresión de amabilidad, haciendo caer a tanta gente, gente que por suerte luego de engañarse un rato, despertó. Pero veamos lo bueno, tu lamentable presentación de vida, me permite sentirme afortunada al colocar en una balanza nuestras personalidades, pero más aún, no necesito eso para pensar en lo que soy & en lo que seré, porque tengo cosas tan valiosas que son el resultado de dar lo que se pide, de ser verdadera, de no rendirse sin dar batalla & de no menospreciar a nadie, de no utilizar a las personas como si fueran peluches de una pequeña niña, que aún no tiene idea de donde está.

* No te insulto, te describo.