El sol de invierno penetra en las calles cuando a medida que la vista se extiende, muestran los ojos,
imágenes como fotografías, fotografías que descubren almas descontentas y agitadas.
Y yo, me siento pequeña,
porque mi alma también describe formas completamente desordenadas,
tristes, abstractas.
Trato de enfocarme pero ahora el aire inhibe y las almas caen,
se escuchan gritos de impotencia y de libertad,
están desconformes y con lo único que les responden es con violencia.
"El miedo a la libertad, crea el orgullo de ser esclavo"
Estamos despertando.
Y es impactante pensar que en tiempos contemporáneos, hablar del pueblo es ser un inútil subversivo.