sábado, 24 de julio de 2010

El señor vanidad dice: ¡miradme! soy mejor que cualquiera, soy más lindo que el que sea, traigo la perfección y el egocentrismo sería bueno que me cogieras ahora mismo!

- ¿me harías feliz ? -.

El señor vanidad dice: No, la felicidad sólo es un espejismo.

La señora ambición dice: Yo te puedo dar poder, para que seas todo lo que siempre soñaste ser, monedas por montones y cheques de millones! Mucho dinero, pero solo hay un pero, feliz no podrás ser.

- si no me da felicidad, ¿para qué quiero dinero?

La señora ambición dice: espera y verás.

En una esquina la soledad camina:

No les hagas caso, ellos nada te pueden dar
son como marionetas dispuestas a matar,
a matar al que las sostenga, pues el alma se les enfriará.
Me presento soy la soledad, a mi no te acerques
porque también te puedo matar.

- Soledad, yo nunca te pude entender, en algunos momentos la gente te "necesita", pero luego nunca más se aparta de ti. Y después de un tiempo se dan cuenta que les consumes la vida hasta el fin, que vil y sucio trabajo el tuyo soledad, que matas silenciosamente, eres una enfermedad.